sábado, 29 de mayo de 2010

Respeten el horario, por favor

No, este no es un blog con horario, este es un blog abierto las 24 horas. Siento si el horario no les va bien, o les parece reducido, pero es que el día no tiene más horas...


¿Captais mi ironía?


Y es que estoy furiosa. Como ya he dicho antes, tengo una asesoria. Como si trabajara poco a lo largo de la semana, los sábados vengo también de 11 a 1. Creo que soy la única de Zaragoza que lo hace así todo el año, salvo agosto, lo siento mucho, en agosto me permito ese lujazo. Pues por lo visto no es suficiente. Llevo ya varios sábados que yo vengo antes de la hora de abrir. Para preparar cosas, o para organizar la futura semana... y vengo antes porque necesito calma. PUES NO. Hoy por ejemplo he venido a las 9 porque necesitaba paz y tranquilidad para redactar un escrito. He dejado la reja corrida, la puerta cerrada... Pues ni paz ni tranquilidad. A las 9 y media me veo a un cliente haciendo gestos detrás del escaparate.

¿A qué hora abres?

¿No ves el cartel? Los sábados abrimos a las 11. Y ya lo sabes, que llamaste ayer a preguntar, además, es el horario que llevamos desde los últimos 14 años.

Uys, no me acordaba... mira es que te traía esto... es un momentito nada más.

Momentito que se ha prorrogado durante 20 minutos que me ha puesto de los nervios. Y es que luego ha sido incapaz ni de decir "oye, gracias por atenderme fuera de horario".


A las 10 y media veo a dos en la puerta... y hablando entre ellos... "pone que abren a las 11" "pues vaya horario, ya podían abrir antes" (recuerdo que hoy es sábado, lo normal en una asesoria es que NO abriera en todo el día) "pues vaya faena" "mira, parece que hay alguien dentro, lo digo porque la reja no tiene puestos los cerrojos"... y los muy ... van y descorren la reja e intentan abrir la puerta... pero no pueden, porque cuando vengo así, la dejo cerrada. "Que raro... se habrá ido a tomar un café... pues ya podría estar aqui, que voy a llegar tarde al partido del chaval"... (Aclaro que a estas alturas ellos no me ven a mí porque despues de antender al primero he echado las persianillas venecianas... de modo que ellos no me ven a mí, pero yo a ellos sí). No sé quienes son, no son clientes habituales, pero si vienen en sábado digo yo que será porque saben que estamos... y entonces lo normal es preguntar el horario, ¿no?



Llamadme borde.. pero por mis narices que hasta las 11 no abro... porque sino... ¿cuándo consigo yo ese momento de paz para hacer cosas? Sí, lo de llevarme el trabajo a casa ya lo hago. Pero hay cosas que alli no se pueden hacer. Y yo también tengo derecho a una vida.


Respeten el horario, por favor.

jueves, 27 de mayo de 2010

¡Hace falta ser ratas!

Alucintante, vaya.


Resulta que yo tenía contratado el servicio de limpieza de la gestoría con una empresa que se dedica a esto. Lo hice en su momento sobre todo por el tema de los cristales y el cartel de la fachada: no hay cosa más horrible que un escaparate con el cristal sucio, aunque sea de una oficina, o un cartel con churretones. Asi que como yo no ando sobrada de tiempo, y además me da miedo subirme a escaleras altas, pues lo contraté. Y ya puesta, pues contraté el servicio de limpieza de la oficina entera.


Lo mejor de la empresa sin duda han sido sus trabajadoras. En ocho años he tenido tres como habituales, y algunas sustitutas para cuestiones puntuales. Y ya digo, encantadoras todas, con las tres habituales he hecho mucha amistad, una de ellas incluso se ha quedado como clienta mía... y yo les tengo un cariño.


Pero la empresaaaaaa... Un desastre. Cuando alguna de las habituales se ponía enferma, o cogía vacaciones, no me mandaban a nadie. Cuando llamaba a reclamar, me decían que disculpara, que era un error de organización. Pero es que errores de esos sieeeeempre tenían, y una ya piensa mal. El material de limpieza acabé por comprarlo yo, pese a que entraba en el precio... pero yo no sufro por una botella de lejia aguada... prefiero comprarla, pero que haya, y que sea buena. Eso sin contar con que les obligaban a ir con unas batas que no se las renovaban nunca... y claro, las pobres batas al final parecian trapos de fregar... que por cierto... un dia descubrí que los trapos que traían para limpiar los cristales eran trozos de sábanas de la SS...

Harta de todo esto, decidimos poner fin al contrato de limpieza. Para cancelarlo, había que avisar con dos meses de antelación. Como me conozco a la empresa por muchos detalles que ha habido a lo largo del tiempo, les avisé con cinco o seis meses, y por burofax.


Ayer, que era el último día que tenían que venir a limpiar, me llaman de la empresa a preguntar si seguimos firmes en nuestra decisión, y les digo que sí, que lo tengo claro.


Al ratito viene la señora que lleva viniendo los últimos cinco años, me comenta que le han dicho en la empresa lo que yo ya le había dicho hacía tiempo, porque no quería crear malos entendidos con ella: que no ibamos a seguir con ellos, y no por culpa de la señora de la limpieza, que es un amor. Le digo que cuando pase por aqui si tiene tiempo que entre y nos tomaremos un café o algo... y en estas que le suena el móvil. Yo sigo trabajando, y en estas que me viene toda sofocada...


* Elena, ¿que se cree que me acaban de decir de la empresa? Pues que si queda material de limpieza, que me lo coja todo y me lo lleve...

* ¿Quéeeeee????

* Ya les he dicho, que no lo voy a hacer... pero si ese material es suyo, usted lo ha pagado...

Debo recordar que en el servicio de limpieza iba incluido el material. Material que la mayoría de las veces como ya he comentado tenía que acabar por comprarlo yo, harta de llamar una y otra vez a reclamar que me trajeran lejía para los baños, por ejemplo. Porque eso y limpiacristales es prácticamente lo único que utilizabamos: el suelo se lava con agua muy escurrida, y no me gustan los sprays en la mopa, el amoniaco cuando lo huelo me da como alergia... Asi que hace mucho tiempo que les dije que no me trajeran de eso, que no lo usaba. Pero que me trajeran lejia. Pues ni eso. Asi que muchas veces la compraba yo. Pues ayer llaman de la empresa y le dicen que se coja todo el material... que si no había cubo de fregar... a lo que la moza les dijo que sí, que un cubo que había comprado yo, igual que los anteriores, porque en 8 años de clientes no me lo habian renovado nunca... ¿y fregona? si, hay fregona, mopa, cepillo... todos comprados por ella... y aunque no fueran comprados... yo no se lo voy a quitar... pero si está usado...


Es alucinante, vaya... yo le dije que se llevara algo, no le fueran encima a echar la bronca. Y me dijo que ni loca... que yo muchas veces le habia dicho que se llevara esto o aquello porque no lo usabamos, no iba encima ahora a llevarse los restos de una botella de lejía...


Hace falta ser ratas...

miércoles, 26 de mayo de 2010

Revisen sus borradores, por favor

Estamos en plena campaña de declaración del IRPF.
Para quien no lo sepa, tengo una asesoria y me toca hacer unas cuantas declaraciones, aparte de comprobar unos cuantos borradores.


Y Dios miooooo... cada año es peor.
Yo no dudo de la utilidad del servicio de comunicación de datos fiscales. Al revés: es un servicio muy interesante, tanto para particulares, como para profesionales. Hacer las declaraciones más complicadas con los datos fiscales al lado ha evitado, evita, y evitará sin dudas muchisimas sanciones de la Agencia Tributaria por no declarar esto o aquello. Porque el contribuyente a la hora de recordar determinados ingresos tiene una especie de memoria selectiva.
Pero el borrador... esa pseudo-declaración que te envían ya lista para simplemente firmar y presentar... ohhhh Dios miooo.... a lo largo del tiempo, he visto:
* Matrimonios en los que la mujer no trabaja y que por tanto es mucho mejor la opción conjunta, y hacienda los manda individuales, diciendo que es la mejor opción posible.
* Madres a las que no se les aplican los 100 euros a que tienen derecho
* Deducción por adquisición de vivienda no deducida, pese a constar la hipoteca en los datos fiscales y tener hacienda constancia por otros años de que esa hipoteca tiene derecho a ser deducida.
* Hijos y/o abuelos no deducidos, o deducidos dos veces, con el riesgo de sanción que ello implica.
* Cuotas sindicales, cuotas de colegios profesionales, cuotas a partidos políticos, no deducidas porque hacienda no tiene conocimiento de ellas.

Lo malo es... que todos más o menos tenemos una idea de lo que "nos tiene que salir", y hay mucha gente que recibe el borrador, ve que el resultado le gusta, y lo presenta sin más. Con lo que puede estar perdiendo mucho dinero.

Para muestra, un botón: acabo de revisar un borrador que inicialmente salía a pagar 560 euros. El contribuyente, conforme, porque el año pasado le salió una cifra similar. Pero... ohhhh... este año le salía mejor la opción conjunta, no la individual. Y no le habían aplicado la deducción por adquisición de vivienda. Resultado: 620 euros a devolver. De pagar 560 a recibir 620 hay 1180 euros de diferencia. Creo que merece la pena revisarlos ¿no?

sábado, 22 de mayo de 2010

En defensa del pequeño comercio

Conste que ni yo ni nadie de mi entorno tiene una tienda "de cercanias" o pequeño comercio, o comercio tradicional, o como le queramos llamar. La tenía mi cuñada, pero se le fue al garete por su culpa, asi que no cuenta.
La cuestión es que esta mañana he salido con idea de comprar una cosa tan peregrina como una jarra-termo. ¿Os parece misión imposible? Hombre, si te vas al Corte Inglés seguro que la encuentras, pero yo he pensado, como me he propuesto últimamente, que a fin de paliar un poco la crisis que sufrimos los pequeños trabajadores y pequeños empresarios (estos últimos no dejamos de ser pequeños trabajadores, no lo olvidemos) en comprarlo en una tienda tradicional.
Y la cosa se ha convertido en eso, una misión imposible. Antes existían muchisimas tiendas a medio camino entre ferreteria-bazar-tienda de regalos, donde lo mismo comprabas dos tuercas, un tendedero plegable y una cristalería para la boda de tu prima. Pero esas tiendas, ahora, gracias a las grandes superficies y las tiendas de chinos, han desparecido. Al menos en mi barrio.
Asi que después de hora y media pateandome la calle, y viendo que la mayoría de tiendas que conocía de ese estilo han desaparecido, acabaré por ir esta tarde a una gran superficie a buscar la dichosa jarra termo. Porque a los chinos no quiero entrar: no compran a empresas españolas, no contratan personal español, no respetan la normativa de seguridad en material infantil, no respetan la no venta de alcohol a menores, no respetan la normativa de horarios...

En fin... intentemos entre todos defender un poquito al pequeño comercio. Aunque sólo sea por egoismo. Porque es en el pequeño comercio donde encontramos de verdad atención especializada, variedad, calidad... No hay cosa que más me guste que ir a una tienda de la cadena de mi amiga Mari Luz, la del blog http://www.algunacosamas.blogspot.com/ y alguna de las dependientas me cuente cómo hace el bacacalo, o qué uso alternativo le puedo dar a la conserva de judias verdes, o cómo prepara las patatas cocidas que venden en bote. ¿Os imaginais, con todos mis respetos, a las cajeras del Carrefour explicando como personalizar la mayonesa de bote?

martes, 18 de mayo de 2010

El misterio del agujero en el calcetín

Pues nada, para salir un poco del tono del post anterior, os planteo un misterio: el misterio del agujero en el calcetín.


Y es que llevo unos dias que no necesito sacar los calcetines a lavar: van directos al cubo de la basura, porque llevo ya unos dias que calcetines que me pongo, calcetines que me quito con un agujero en el pie derecho.


Juro que llevo las uñas cortitas, sin picos ni aristas ni nada de nada... suavecitas, las he tocado mil veces.
Juro que los calcetines no son viejos... los de hoy por ejemplo me los he puesto nuevos... quitar la etiqueta y ponerlos.


Pero no hay manera... cuando me los quito... ahi está el dedo gordo saludando por la ventanita del agujero del calcetín.


Mi costi me sugirió que quizás la culpa fuera del zapato... que estuviera muy duro por arriba y me desgastara el calcetín. Me cambié de zapatos. Y nuevamente... el agujero en el calcetín.


Menos mal que un día de estos se decidirá a venir el buen tiempo... me pondré sandalias... y me olvidaré de los agujeros en el calcetin.


Lo malo será el próximo invierno...no voy a ganar para calcetines.

lunes, 17 de mayo de 2010

¿Y si fuera al revés?

No quería inaugurar mi blog con este post. Prefería guardarlo para más adelante. Pero como es un tema que me lleva rondando la cabeza desde la semana pasada, y no se me ocurre otra cosa mejor... pues declaro inaugurado mi blog con el siguiente comentario.
Llevo ya unas semanas que veo en una farola un cartelito que dice: "se alquila habitación a mujer latina". Cada vez que lo leo, no puedo evitar pensar: si en vez de poner mujer latina pusiera mujer española, seguro que no faltaría el comentario de "cartelito xenofobo" o "cartelito racista".
Yo entiendo que se alquile una habitación a una mujer y no a un hombre. Quizá la propietaria del piso sea una mujer y no le apetezca meter a un hombre en su casa.
También podría entender que por cuestiones de buena convivencia, o para evitar futuros problemas, pidan que esa mujer hable castellano. Porque si le alquilas la habitación a alguien que no te entiende puede luego surgir algún malentendido.
Pero que pidan expresamente que sea latina... ¿eso no es también una forma de racismo pero a la inversa?
Esto me recuerda, hace un tiempo, cuando del INEM le denegaron a un chino una oferta de empleo para traer trabajadores extranjeros sin permiso de trabajo, porque pedía expresamente que los trabajadores fueran de nacionalidad china. Le contestaron diciendo que la Constitución Española no permite la discriminación por razón de nacionalidad. Y pedir trabajadores de una nacionalidad era discriminatorio. El chino no lo entendía, y no hacía más que decir que él sólo quería dar trabajo a chinos, no a españoles. Y lo decía a voz en grito... nadie le decía nada. Si hubiera sido al revés... ¿qué hubiera pasado?
En fin, no sé si soy retorcida... No me tengo por racista, tengo muchos clientes extranjeros, y no sólo no he tenido problemas con ellos, sino que con algunos además tengo muy buena relación, pero no puedo evitar tener ese pensamiento.